Hombres y mujeres con sombrero,
vendedores diambulantes,
niños lustrabotas,
policias de verde mascando coca
en la esquina
señoras-gallinas empoyando un puesto de maíz inflado
en el Prado
empleados durmientes, carros de bebidas, anticucho y jado.
Los indigentes son los de siempre:
los más castigados son los menos observados.